como las cicatrices que no se borran.
Pero quedan las cicatrices, el dolor imborrable por lo que se ha vivido y la pena de saber que muchos otros nunca saldrán adelante. Y que otras vidas nacerán en el marco de ese infortunio.
Viviana Herrero
como las cicatrices que no se borran.
Pero quedan las cicatrices, el dolor imborrable por lo que se ha vivido y la pena de saber que muchos otros nunca saldrán adelante. Y que otras vidas nacerán en el marco de ese infortunio.
Viviana Herrero